Cuidados esenciales para evitar la reparación del lavavajillas

Sin llegar a ser tan indispensable como otros electrodomésticos (por ejemplo, la lavadora o el frigorífico), no cabe duda de que el lavavajillas ha ido ganando presencia e importancia en nuestros hogares.

SAT Madrid. Evita la reparación de tu lavavajillas con estos cuidados mínimos


El lavavajillas o lavaplatos nos ahorra tiempo, trabajo e, incluso, gasto de agua. Pero también, es un electrodoméstico que requiere de unos cuidados mínimos para evitar que se deteriore la efectividad y calidad del lavado y el propio aparato.

  • Previamente, enjuagar la vajilla: Aunque en muchos foros recomiendan introducir la vajilla en el lavaplatos tal cual (con el fin de ahorrar en el consumo de agua) es lógico pensar que retirar los restos de comida con papel de cocina y un buen chorro de agua previo facilita desprender los restos de comida más grandes para evitar atascos y optimizar la calidad del lavado del lavavajillas. El coste de la reparación del electrodoméstico supera, con creces, el del consumo de agua.
  • Colocar la vajilla correctamente: Si bien es recomendable cargar el lavavajillas al máximo para ahorrar agua y energía, hay que asegurarse de que entre platos, vasos y demás utensilios quede suficiente espacio para que el agua llegue completamente hasta todos ellos. La cubertería se debe poner en el cesto, con el mango hacia abajo. Si el lavavajillas tiene bandeja portacubiertos, colocarlos con cuidado para que queden todos de costado. Una vez cargado completamente, asegurarse de que las aspas pueden girar libremente.
  • Vaciado del lavaplatos: Una vez finalizado el ciclo de lavado, esperar media hora (aproximadamente) antes de abrir el electrodoméstico. Si se abre rápido, la vajilla se enfría rápidamente y se produce la condensación del vapor. Sin embargo, en el lavavajillas cerrado, el calor contribuirá a que se evaporen los restos de humedad. Después, sacar toda la vajilla. Dejar los utensilios mucho tiempo dentro del lavaplatos una vez finalizado su ciclo afecta a algunos de los materiales de los utensilios y a la calidad del acabado. Dejar abierto el lavaplatos hasta que esté seco o utilizar una gamuza o papel de cocina para retirar los restos de agua antes de cerrarlo. Así, se evita la concentración de humedad en el interior y la posible aparición de moho.
  • Retirar residuos: El lavaplatos no hace desaparecer los restos de comida, grasa, etc. Por ello, es necesario limpiar la cavidad del lavavajillas y filtros exteriores con cierta frecuencia (al menos, una vez a la semana, en función de su uso) y realizar una limpieza más profunda cada 3 meses.
  • Agua caliente. Antes de poner en marcha el lavaplatos, deja correr unos instantes el grifo de agua caliente. Así, la carga de agua del lavavajillas se hará con la temperatura adecuada para optimizar su rendimiento y la calidad del lavado.
  • Frecuencia de uso: El lavavajillas necesita ser usado con relativa frecuencia. Tras periodos más o menos largos de inactividad (por ejemplo, durante vacaciones) es recomendable realizar un ciclo de prelavado completo (en vacío) para eliminar la suciedad interna que pudiera haberse resecado.
  • Detergentes, abrillantadores, etc.: Nunca se deben mezclar distintos productos limpiadores ya que existe el riesgo de generar una reacción química no controlada que dañe al electrodoméstico.Siempre se deben utilizar productos diseñados para su uso en lavavajillas. Nunca se deben usar detergentes de lavado a mano puesto que éstos generan gran cantidad de espuma que pueden dañar al electrodoméstico. Los aditivos al detergente, sal y abrillantador, son fundamentales para la calidad del lavado. El primero, ajusta la dureza del agua (para evitar depósitos de cal sobre la vajilla y el aparato). El segundo, potencia la acción de la sal y facilita un secado sin manchas de agua y cal. Si se usan pastillas ‘todo-en-uno’ y el secado no es satisfactorio, añadir abrillantador.

Limpieza del lavavajillas

Los restos de comida acumulados, la grasa, la cal y las impurezas propias del agua generan malos olores, moho, atascos y pueden provocar que nuestro lavavajillas no funcione correctamente. Incluso, provocar una avería.

Si quieres saber más sobre la limpieza del lavavajillas, te recomendamos otro artículo de nuestro blog: Limpieza del lavavajillas con bicarbonato sódico y vinagre de limpieza»

 

Si tu lavavajillas no funciona correctamente: no deshace bien el jabón o deja manchas de sal o cal, no calienta el agua, hace mucho ruido, se sale el agua, etc... contacta con SAT Madrid, Servicio Técnico Electrodomésticos. Te aseguramos un servicio eficaz, de calidad y garantizado

 

 

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